Estar atentos a cuándo es momento de someter a la empresa a un upgrade es sumamente importante para garantizar su óptimo funcionamiento.
Traduciéndose literalmente como actualización, la idea de esta dinámica es la de asegurarse que todos y cada uno de los componentes de una compañía estén actualizados a su última versión, y que todos los datos almacenados sean frescos, vigentes y, sobre todo, verdaderos.
La tecnología avanza a pasos agigantados, y las empresas deben estar a la altura. El upgrade puede ser más barato o más costoso, y requerir de diversas cantidades de tiempo según su dificultad.
Si notás que los procesos empiezan a demorar cada vez más tiempo, que las webs andan lento, que transaccionar la información se vuelve cada vez más difícil y que hay múltiples cuellos de botella, todas esas son señales de que algún componente (o todos) necesitan una actualización.
¿Por qué es tan importante el upgrade?
En el mundo moderno, los mercados son más demandantes que nunca. Los consumidores esperan que las marcas sean capaces de satisfacer sus demandas en cualquier momento y cualquier día.
Eso obliga a los negocios que deseen posicionarse y tener éxito a poder trabajar las 24 horas del día, sin descanso.
Y, por si eso fuera poco, en este viaje por garantizar la mejor experiencia para los consumidores, también es fundamental asegurarse de que no se produzcan demoras ni retrasos en los procesos, puesto que eso es sumamente engorroso para los clientes.
Es justamente para dar solución a todas esas situaciones que aparece el concepto de upgrade: para tener éxito, las empresas deben estar siempre actualizadas, listas para actuar de forma eficiente y fluida.
¿Cómo puedo garantizar que el upgrade se realice correctamente?
Si bien realizar el upgrade de un componente, o de varios, puede ser sencillo a simple vista, eso no quiere decir que no requiere de múltiples cuidados tanto antes como durante y después.
Para empezar, es fundamental que se realice, antes de proceder con ninguna modificación, un Capacity Planning, para así asegurarse de que la expansión de la arquitectura esté bien contemplada y que no se produzca ningún error.
Ahora bien, una vez realizado el upgrade, es fundamental someter a los componentes actualizados a un riguroso proceso de Health Check. Este diagnóstico se lleva a cabo tanto en los componentes individuales como en la arquitectura en su conjunto, para así evaluar su funcionamiento en singular y colectivo.
La idea de esto es encontrar posibles fallas y puntos flojos, para así solventarlos a tiempo. De esta forma, se evita que escalen en problemas mayores.
¿Cómo se encarga Preteco de implementar estas actualizaciones?
Con más de 20 años de experiencia en el rubro, en Preteco contamos con un equipo de profesionales especializados en upgrade.
Ellos están capacitados para brindar una atención personalizada y de la más alta calidad, abarcando el proceso de upgrade de punta a punta.
Son muchos los casos de éxito que tenemos, habiéndonos ocupado de la actualización de las arquitecturas IT en empresas de los más variados rubros y tamaños.
En el marco de nuestra vertical de tecnología, desde Preteco implementamos todo tipo de soluciones en pos de traerle el upgrade ideal a tu compañía. Desde servicios de optimización y capacity planning hasta diseño de arquitecturas y migraciones integrales, todo eso es posible con nuestra ayuda. Al mismo tiempo, ofrecemos servicios de seguridad y auditoría tanto de bases de datos como de data servers.
El objetivo es que puedas desprenderte tanto de tus aplicaciones como de tus sistemas heredados, es decir, aquellos que ya han quedado obsoletos frente a las necesidades que el día a día le demanda a tu negocio.
Si estás buscando la mejor manera de impulsar tu empresa hacia lo más alto, siempre manteniéndola funcional, activa y en constante evolución, no queda ningún tipo de duda de que implementar soluciones de esta índole y confiar en nosotros para guíar el proceso es la mejor opción.
Para conocer más, te invitamos a ponerte en contacto con nosotros ingresando en nuestra página web.
